
Renata Cabrales
@renatarelata
Desde su nacimiento, hace un poco más de 50 años, el Teatro la Candelaria, primero, en cabeza de Santiago García, ahora, bajo la dirección de la maestra dramaturga, Patricia Ariza, ha ondeado la bandera de la paz y la justicia social. Es así como ha liderado la lucha por la implementación de cada uno de los acuerdos de paz que se han llevado a cabo en el país, y que, por lo general, han sido fallidos, debido a la necesidad absurda de la ultraderecha conservadora de continuar con la guerra absurda que afecta directamente a la población más vulnerable, sobre todo, la que habita en las regiones. Y es por eso que una de las obras más importantes de este reconocido teatro, producto de una creación colectiva y con el fin de mostrar la realidad del conflicto y de uno de los primeros acuerdos de paz del país es Guadalupe Años Sin cuenta.
Uno de los eventos más importantes del Teatro la Candelaria es el Festival de Mujeres en Escena por la Paz y el Foro Polifónico Nacional de Mujeres, que se lleva a cabo en diferentes escenarios, desde hace 28 años.
Este Festival consiste en darle prioridad a las obras producidas y dirigidas por dramaturgas, y cuyos temas giran alrededor de las violencias que afectan a las mujeres.
Por otro lado, dentro del festival se lleva a cabo el Foro Polifónico Nacional de Mujeres, espacio que consiste en hacer eco de las problemáticas que enfrentan lideresas sociales y miembros del movimiento social en las diferentes regiones del país.
En este momento histórico que vive el país, con un gobierno uribista que ha demostrado no tener ningún interés por la difícil situación que atraviesan los lideres y las lideresas sociales, quienes están siendo vilmente perseguidos y asesinados por fuerzas oscuras que buscan silenciar la oposición, el Teatro la Candelaria crea un espacio para que las lideresas le cuenten al país la verdad del conflicto que enfrentan en sus territorios.
Este año, el Festival abrió sus puertas al público con su reconocida obra PazHaréLa, cuyo tema central es mostrar en la pasarela, no esas mujeres que normalmente la sociedad reconoce como “modelos”, debido a los estereotipos de belleza que estas deben cumplir, es decir, mujeres muy delgadas que no representan a la mayoría de la población femenina, sino, según afirma la maestra Patricia Ariza: “Nuestra PazHaréLa es un espacio para las mujeres de verdad, las mujeres blancas, negras, altas, bajas gordas, estudiantes, maestras, prostitutas, mujeres vulnerables y las mujeres lideresas sociales, que sí tienen mucho que decirle a la sociedad y este es el espacio ideal para hacerlo”.