Magnolia Agudelo
En 2017, a un año de la firma del acuerdo final de paz, la comunidad y las entidades distritales, que hacen presencia en la localidad Antonio Nariño de Bogotá, organizaron una iniciativa artística y cultural que permitiera conmemorar el primer aniversario de la firma del acuerdo histórico que puso fin al conflicto armado, y nos impuso nuevos retos para la construcción de una paz estable y duradera.
En la preparación de esta iniciativa se consolida la Red de Educación, Arte y Cultura por la Paz de Antonio Nariño y la Red de Maestros/as Pintando la Paz donde se generan insumos y reflexiones pedagógicas necesarias para la realización de lo que sería el primer Carnaval Local de Educación, Arte y Cultura por la Paz, que contó con la participación de 600 estudiantes líderes de la comunidad, quienes se tomaron las calles y parques para expresar su anhelo de paz y conmemorar el primer año de la firma del Acuerdo Final de Paz.
Paz y convivencia
El pasado 2 de noviembre, se realizó la segunda versión del Carnaval Local de Educación, Arte y Cultura por la Paz, producto del esfuerzo y compromiso de la comunidad, que tiene como finalidad visibilizar las apuestas artísticas y culturales que construyen paz y convivencia en el territorio, y se constituyen en herramientas para fomentar la participación ciudadana en el actual proceso de paz. Para esta segunda versión, se realiza previamente el segundo coloquio “Recuperando la Memoria Histórica desde la Escuela”, cuyas conclusiones llenan de contenido el Carnaval:
El coloquio evidencia el recorrido pedagógico que desde la escuela se ha realizado para identificar las causas y el origen del conflicto social y armado de nuestro país, por lo que el logro de la firma del acuerdo de paz del 24 de Noviembre de 2016, expresa que las condiciones están dadas para continuar potenciando en las comunidades educativas una mirada argumentativa y crítica, que permita constituir espacios de participación ciudadana que acompañen y realicen seguimiento a la implementación del acuerdo final de paz.
La cátedra de la paz ha motivado un resurgir del legado histórico de nuestro país, nutriendo el ámbito social, familiar y cultural para reconocernos como actores sociales indispensables en la construcción de la paz.
Recuperación de la memoria histórica a la luz de los saberes y experiencias pedagógicas desde la diversidad etnográfica presente en nuestras comunidades educativas. Esta tarea se fortalece cada día desde la escuela, a través de los proyectos que buscan revivirla y documentarla retomando la genealogía familiar.
Las muestras artísticas nos permiten acercarnos a nuestros legados históricos buscando puntos de encuentro en nuestras diferencias, aportando a una cultura para la reconciliación y la paz.
Se considera necesario evidenciar en las calles de nuestra localidad el anhelo de paz reflejado en las instituciones educativas, por lo que la segunda versión del Carnaval de Educación, Arte y Cultura por la Paz es un llamado a la ciudadanía en general a unirse a la construcción de paz desde el quehacer diario e implementar prácticas por la convivencia y la reconciliación en nuestros hogares, escuela y trabajos para la transformación y materialización de una paz estable y duradera que brinde condiciones justas a nuevas generaciones de niños, niñas y jóvenes de la localidad y de cada rincón del país.
Una gran participación
Con la participación de niños, niñas, adolescentes, padres y madres de familia, docentes, organizaciones sociales y culturales la localidad este año realiza la segunda versión del Carnaval Local de Educación, Arte y Cultura por la Paz, contando con cerca de 1.000 personas, entre comunidad educativa, organizaciones, colectivos. Líderes de la localidad se toman las calles del barrio Restrepo para llenar de color, alegría y arengas por la paz, en la conmemoración del segundo año de la firma del Acuerdo Final de Paz.
La localidad le cumple a la paz y exige el cumplimiento de lo acordado por parte del Estado colombiano, clamor expresado en las calles por las agrupaciones artísticas, bandas marciales, grupos musicales, bailes, palos y canecas, eco desfile y más de 30 expresiones colectivas que exigen el derecho a la paz en la localidad y en todo el territorio nacional.