Córdoba padece el azote de la corrupción y el paramilitarismo
Hernán Camacho
@camachohernan
La visita de la candidata al Senado por la lista Decentes en representación de la Unión Patriótica, Aída Avella, se realizó el pasado 23 de enero a la ciudad de Montería, capital del departamento de Córdoba. Con su acostumbrado estilo, la candidata recibió de la ciudadanía reclamos por las acciones que realiza la clase política que dirige ese departamento y no vaciló en denunciar cada una de las maniobras de esas castas por apropiarse de lo público.
En su encuentro con el pueblo cordobés, Avella conoció en detalle las denuncias que se ventilan a nivel nacional sobre los carteles de la corrupción y el narcotráfico. Y es que, justo en medio de su visita, la Procuraduría General de la Nación anunciaba apertura de investigación contra el suspendido gobernador Edwin Lyons por el cartel del Sida, en el que se habrían robado al menos 100 mil millones de pesos.
Sin ley
“Nos encontramos un departamento que por sus problemas parece una isla en la que no existe ni dios ni ley. O bueno, la ley de los “Ñoñitos” y “Besailitos” y el dios de la delincuencia organizada, bandas criminales que son los paramilitares de esta década, y que parece estar por encima de la Fuerza Pública y la Policía Nacional. Es un departamento capturado por la corrupción, la politiquería, la intentona de las multinacionales por quedarse con los recursos del territorio y por la incapacidad de la Fiscalía y los jueces para aplicar justicia a quienes se apropian, a las malas, del erario”, señaló la candidata Avella.
Y es que los problemas de ese departamento pasan por la fuerte disputa entre las casas Lyons, Besaile y Eliías, los clanes que manejan el departamento a su antojo. La delación que realizó un exgobernador, hoy capturado en los Estados Unidos, contra los Elías y Besaile, ha hecho que estos últimos preparen sus propias confesiones, que esucien aún más a la familia Lyons.
Plan Picota
“Parece que la anunciada delación del exgobernador Alejandro Lyons, desató una guerra entre los clanes políticos que se ha venido sintiendo en la elección de los próximos congresistas. Un departamento que define su futuro en el patio de los funcionarios públicos de la cárcel La Picota. Se dice en la calle que las elecciones se definen en el patio de la cárcel y el “Plan Picota” es la operación electoral sin precedentes para quedarse con la curul que hoy tienen los bandidos”, indicó la candidata al senado en su cuenta de Facebook.
Lo cierto es que visitar Montería y pasar por el barrio El Recreo es un indicio de lo que se han apropiado las familias que han tenido poder en ese departamento. Es cuestión de ver la mansión del “Ñoño” Elías y la casa que construyó el actual mandatario local, las casas de los senadores y exsenadores, así como las mansiones de la familia Lyons, para inferir que su paso por la vida pública ha sido de mucho provecho para su patrimonio personal.
Mercado electoral
El mercado electoral es otro de los males que padece por estos días el departamento. El pago por el voto se encuentra inicialmente tasado en 50 mil, pero se dice que puede subir hasta la cifra de 500 mil pesos, si se trata de una familia de más de seis miembros que voten en una especie de combo por la llave de los candidatos a la Cámara y al Senado.
Pero además, denuncia Avella, que ganan las voluntades de las gentes de barrios humildes con rifas de motos, neveras, televisores y fiestas. No se ven los hijos, hermanos y herederos de los parapolíticos o de los congresistas encartados por Odebrecht, debatiendo sobre política pública, sino que andan en los barrios populares de fiesta en fiesta comprando líderes sociales que son los intermediarios entre la plata de los votos directos y las dádivas para sus votantes.
Ñoñomanía
En Sahagún, municipio a media hora de la capital de Córdoba, sus gentes humildes, parecen sumergidas en una realidad insalvable. La Ñoñomanía, es la afición por respaldar a la familia Elías. Un poblador nos contó que ese municipio seguirá votando por la casta, ahora en cabezada por Jhony Elías, cuyo slogan de campaña ya es famoso en Sahagún “Con el aval de dios”. Dice el vendedor de ilusiones de la plaza principal: “Todo lo que ha hecho el Ñoño, asfaltó el municipio y puso linda la plaza”. El quehacer por estos días allí es esperar con ansias la visita de la campaña del aval de Dios, para recibir, premios y bonos preelectorales de los “generosos” Ñoños.
Paramilitares
Y como si no fuera suficiente, el departamento está secuestrado por las bandas criminales que tienen atemorizados a los ciudadanos. Todos saben quiénes son los dueños del territorio y entre quiénes las disputas por las rutas del narcotráfico, pero todo el mundo calla.
Según el último informe de la Defensoría del Pueblo, ya estarían en marcha planes de incursión al departamento de la banda paramilitar denominada los “Caparrapos” con origen en la población de Caparrapí y el Bajo Cauca antioqueño. La idea es apropiarse del territorio desde Urabá hasta Córdoba y su salida al mar.
Aseguran fuentes de inteligencia que los “Caparrapos” están siendo financiados por el cartel mexicano de Sinaloa. “Las autoridades lo saben, ellos tienen la información y tienen todas las herramientas tecnológicas y de investigación criminal e inteligencia para dar con su paradero. Se me antojan son varias preguntas: ¿habrá oficiales que están siendo objeto de pagos de esa organización para que la dejen trabajar? ¿Hay connivencia de la fuerza pública? Es que no puedo creer, como me lo decían algunos campesinos aquí en Montería: hay zonas en donde no puede entrar el CTI para hacer un levantamiento, municipios como Guateque o Moñitos. ¿Pero qué es eso?”, indicó Avella a medios locales.
Dicha información ya la tienen las autoridades y en especial la comandancia de las Fuerzas Militares. VOZ conoció que el inspector general del Ejercito viajó esa semana a Montería para constatar las denuncias hechas por Avella, y recoger mayor información de algunos líderes campesinos que están dispuestos a denunciar con nombre y apellido las atrocidades de las arremetidas paramilitares.
Alternativa
La indignación de los cordobeses se expresa de puertas para adentro. Señalan a las castas como las responsables de la pobreza que padecen, pero se niegan a encontrar alternativas. Ese departamento podría darle una lección de dignidad al país y voltear las apuestas al escoger a otros candidatos al Senado diferentes a los que han gobernado.
Así las cosas, las elecciones en este departamento están entre la corrupción o la decencia: “Este año se define si nos vamos a elegir entre corrupción o decencia. Aquí no podemos decir que el Ñoño va a poner su candidato y exgobernador Lyons con candidato al Senado. Les importa un pepino el departamento de Córdoba y su gente. Son unos sinvergüenzas. Somos la alternativa”, señaló Aída Avella.