Renata Cabrales
@Renatarelata
“¿Qué historia es esa de las ratas? – No sé, es cosa muy curiosa. Ya pasará”. Las ratas causantes de la peste en la obra de Camus, murieron lentamente y la pesadilla llegó a su final. En tiempos pasados, las ratas fueron las causantes de la epidemia de la peste que generó una seria pandemia. En este momento de pandemia mundial por el coronavirus no se puede decir que la culpa es de las ratas, ni siquiera se ha comprobado que sea por culpa de la sopa de murciélago tan apetecida en la China.
La epidemia nada tiene que ver con las ratas, pero sí los daños colaterales de la implementación obligatoria de la cuarentena para evitar contagios. Esto en el caso de Colombia, donde es curioso que se les llame “ratas” a los miembros de la clase política corrupta y ladrona que han condenado al país a la pobreza.
Entonces, de manera alegórica, se puede hablar de la epidemia de la pobreza que se expande en el país, como un fenómeno provocado sistemáticamente, por las “ratas de alcantarilla”, que hacen parte de la elite gobernante; así ha catalogado a los corruptos el mismo presidente Duque, al querer lavarse las manos cuando el pueblo indignado le hizo reclamos por el programa de Ingreso Solidario, que supuestamente beneficiaría a las personas menos favorecidas del país, y que resultó ser un fraude.
Por el contrario, miles de millones de pesos del programa destinado a dar subsidios a unos tres millones de personas vulnerables, en medio de la pandemia, se perdieron de manera “misteriosa”, tal como sucedió con el programa Agro Ingreso Seguro, en manos del exministro Andrés Felipe Arias, condenado por los delitos de celebración de contratos sin cumplimiento de requisitos legales y peculado por apropiación en favor de terceros (¿rata de alcantarilla?).
«Salen, salen, con una alegría senil”. Salen las ratas en la historia de Camus y salen en la historia de la pandemia que se vive en Colombia, pues mientras las “ratas de alcantarilla”, que han provocado la epidemia de miseria en el país se roban “con alegría senil” los recursos destinados para los más necesitados, estos han salido de sus casas, a pesar de la cuarentena obligatoria, principalmente en algunos sectores de Bogotá, a manifestarse y exigir al gobierno el derecho al supuesto Ingreso Solidario para no morirse de hambre.
«Las plagas, en efecto, son una cosa común, pero es difícil creer en las plagas cuando las ve uno caer sobre su cabeza. Ha habido en el mundo tantas pestes como guerras y, sin embargo, pestes y guerras cogen a las gentes siempre desprevenidas»: La peste.
Y desprevenido ha cogido la pandemia al pueblo colombiano, la cual, por culpa de gobiernos corruptos: “ratas de alcantarilla”, se ha expandido al lado de una creciente epidemia de miseria y de injusticia social, que se multiplica de forma exponencial, debido también a un precario sistema de salud, con un modelo de aseguramiento que se implementó con la Ley 100 de 1993, que le dio vida a las EPS; y en estos momentos del coronavirus una de las protagonistas de los escándalos de corrupción. Porque las ratas que han causado nuestra peste de miseria, incluso, se niegan a invertir en salud y brindar garantías laborales a los profesionales del sector que enfrentan la epidemia, en precarias condiciones, y a quienes osan llamar “héroes”.
VOZ te necesita
📢 Si te gustó este artículo y quieres apoyar al semanario VOZ, te contamos que ya está disponible la tienda virtual donde podrás suscribirte a la versión online del periódico. Ofrecemos el mejor análisis político, económico y cultural para pasar la cuarentena en casa.
#QuédateEnCasa y lee el semanario VOZ.
👇🏽👇🏽👇🏽