Según la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación, Fecode, el Presupuesto General de la Nación para el año 2019 deja entrever un futuro difícil para la clase media del país. El proyecto que se debatió en las comisiones económicas evidencia que, aunque la educación cuenta con una de las sumas más altas, esta no es suficiente para solucionar la grave crisis que vive el sector.
En palabras de Fecode: “Un día antes de la movilización de las universidades públicas en el país, el pasado 10 de octubre, la ministra de Educación, María Victoria Angulo, aseguró que para el año 2019 el presupuesto general de la Nación, destinado a la educación, pasará de 38,7 billones a 41 billones de pesos. Aun con el billón prometido por Duque y el acuerdo con los rectores, el sector sigue en déficit. Frente a la realidad, los recursos son insuficientes y eso se traduce en dificultades financieras para las instituciones educativas públicas”.
“En la distribución del presupuesto se sabe que el 16% va para la educación, es decir, es el segundo sector que más registra recursos, sin embargo, estos son insuficientes para lo que necesita hoy la educación, pues se habla de cerca de 18,2 billones adicionales”, manifestó Sneyder Rivera Sánchez, coordinador de Investigación de Cedetrabajo.
El presupuesto general será $258,9 billones de pesos. Sectores como defensa y salud tendrán una mayor partida con asignaciones de 33,6 billones y 28,4 billones, respectivamente. Rubros para ciencia y tecnología, así como, entidades claves para la implementación del acuerdo de paz, como la Agencia de Renovación del Territorio, la Agencia de Desarrollo Rural y la Unidad Nacional de Protección tienen las asignaciones más bajas.
“En la distribución del presupuesto la salud se está llevando aproximadamente el 13%, muy parecido a lo que se lleva el sector de defensa y la policía, más ahora que está en debate y hay una polémica muy grande frente a la idea de querer comprar un escudo antimisiles que cuesta cerca de 1,2 billones de pesos, en lugar de redireccionar estos recursos a sectores que realmente lo necesitan”.
El pasado 21 de septiembre el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, radicó ante el Congreso una carta con las modificaciones al proyecto. En la misiva se estableció que se disminuiría en 14 billones el dinero destinado para el pago de deuda para redistribuirlo en áreas de funcionamiento 4 billones e inversión con 10 billones.
César Giraldo, economista de la Universidad Nacional, comentó: “El gobierno anterior le dejó a Duque un hueco de 24 billones de pesos. Sin embargo, hizo un recorte en el servicio de la deuda de 14 billones, pasando plata para el Ministerio de Defensa, Familias en Acción, créditos educativos, etc.”
“El Congreso de la República dio su aprobación final sobre el monto y la distribución del presupuesto general del 2019. Pero en la práctica la plata quedó mal distribuida, especialmente porque Duque dejó todo el peso económico del déficit a una posible reforma tributaria que se soportará en hombros de las clases media y baja”, explicó Fecode.