Redacción Derechos Humanos
La Asociación Campesina Ambiental del Losada-Guayabero, ASCAL-G, afirma que desde el día 18 de febrero de 2020, tropas del Ejército y hombres de la Policía Nacional, vienen haciendo presencia de manera inusual en las vías, entre el municipio de San Vicente del Cagúan y la inspección de San Juan de Losada, las veredas de El Rubí y Puerto Losada, entre otras.
La presencia de más de mil hombres del Ejército y la Policía en los caseríos, armados y patrullando las veredas, ha despertado el miedo entre la población. Años atrás, antes del proceso de paz con la guerrilla de la otrora FARC-EP, había un amplio nivel de confrontación militar entre estos grupos, lo cual generó desplazamientos, detenciones arbitrarias y hasta un amplio número de desapariciones forzadas, así como procesos judiciales contra campesinos de la región.
Combates y detenciones arbitrarias
Desde el 20 de febrero, a las 6:20 de la mañana, y señalan las organizaciones sociales que sus miedos, hoy, se hacen evidentes en la realidad.
La población de la Vereda El Rubí, en medio de su caserío, padeció los primeros combates, que dejaron como resultado algunos militares muertos y heridos, las casas de los y las habitantes quedaron averiadas en medio del fuego cruzado generando zozobra y aumentando el terror en la zona y en las comunidades campesinas aledañas.
Las comunidades del Losada Guayabero se encuentran en alerta y se han movilizado hacia la vereda Aires del Meta, por Caño Juan.
Las organizaciones campesinas aseguran que, siendo las 5:00 pm de ese mismo día, el Ejército seguía ocupando el centro poblado y se veía la intención de adelantar algún tipo de operativo entre las comunidades para confiscar ganado o con la intención de desalojar a los pobladores a quienes, desde Parques Nacionales Naturales de Colombia, se han señalado de vivir en zonas de reserva natural.
Estas comunidades llevan 30 años en sus predios, y según ASCALG, pretenden, por medio de la fuerza, hacer que campesinos abandonen los predios sin tener claro un rumbo fijo.
En esta región: “habita población que históricamente ha sido víctima del conflicto armado y que hoy, además, es victimizada por vivir dentro de áreas que el Estado ha delimitado como protegidas, sin tener en cuenta las razones históricas que llevaron a estas comunidades campesinas a asentarse allí, ni tampoco las estrategias de conservación que organizaciones como ASCAL-G han emprendido durante años para la conservación autónoma de esos ecosistemas”.
El 22 de feb, en horas de la mañana, campesinos de la vereda El Tapir, en el Meta, denunciaron, además de más de 40 detenciones arbitrarias por @COL_EJERCITO el sobre vuelo de 6 helicópteros, los cuales gasearon y dispararon contra campesinos. Se reportan personas heridas pic.twitter.com/qYHiMFVXla
— Semanario VOZ (@SemanarioVOZ) February 22, 2020
Detenciones arbitrarias y ataques militares desde helicópteros
El 21 de febrero, nuevos pelotones del Ejército Nacional, desembarcaron en varias zonas del departamento, llegaron en horas de la noche a los caseríos y veredas y detuvieron a varias personas que habitaban en estas zonas.
Las comunidades, estuvieron en medio del terror y de la arbitrariedad del Ejército, pues esta organización no tiene potestad para acceder a las viviendas de habitantes, ingresar a la fuerza, intimidar a las familias y detenerlas. Ninguna detención, de las más de 40 que se vienen denunciando en este momento, se ha dado con orden judicial.
Campesinos de la región han asegurado que en el registro que llevan de las detenciones, se encuentran un alto número de menores de edad entre los 3 y 16 años, los cuales pretenden ser entregados a ICBF.
Todo en medio de un procedimiento ilegal y arbitrario en medio de la noche. ASCALG, también tiene el reporte de campesinos desaparecidos en varias veredas, lo que ha levantado aún más la preocupación por la seguridad de la población.
En años atrás, esta zona del país, fue reportada como una de las que, en medio del conflicto, el Ejército desapareció a muchos campesinos que luego aparecieron en fosas comunes, como las del Cementerio de la Macarena, en donde se han evidenciado más de dos mil cuerpos, reportados como NN.
El día 22 de febrero, en horas de la mañana, los pobladores nos reportaban el sobrevuelo, en la vereda El Tapir, de seis helicópteros, los cuales han gaseado a los campesinos y también se reportaron disparos desde el aire, que han dejado a diferentes personas heridas.
Estos reportes se entregan mediante llamadas telefónicas.
Los detenidos están siendo llevados a Villavicencio, Meta y otros municipios del Caquetá para ser judicializados.
Preocupa que los niños y niñas detenidas estén siendo puestos a disposición de Bienestar Familiar, en medio de procedimientos irregulares. El acompañamiento lo adelantan abogados del Comité Permanente por la Defensa de los DDHH, CPDH.
*Noticia en desarrollo