Otro hecho de violencia en contra de líderes sociales se presentó en el departamento del Meta, esta vez la víctima fue una líder de la fundación DHOC
Desde su creación, la Fundación de Derechos Humanos para el Oriente Colombiano, DHOC, ha sido objeto de constantes agresiones en contra de sus integrantes, víctimas de falsos positivos judiciales y amenazas por parte de los grupos paramilitares que ven en sus líderes de derechos humanos, una incómoda presencia para seguir adelantando en las regiones, acciones desmedidas en contra de la desprotegida población.
Es así, como el pasado siete de mayo, sobre las 7:30 pm, dos hombres encapuchados ingresan a la finca en donde se encontraba la líder Doris Rivera, defensora de DD.HH. de la Fundación DHOC y directiva nacional de Anzorc. Los dos hombres armados, encañonaron a los miembros de la familia que vive allí, los amenazaron e intimidaron con hacerles daño. Los escoltas de la líder fueron despojados de sus armas, sometidos en el suelo y sus cabezas fueron cubiertas con cobijas.
Hay que mencionar que Doris cuenta con un esquema de protección, pues en años anteriores había sido víctima de agresiones y amenazas por parte de los grupos paramilitares, también fue víctima de un falso positivo judicial del cual salió absuelta. Esta situación la había motivado a pedir protección para su vida e igualmente tuvo que salir del país con el acompañamiento de un programa de refugio temporal.
Los testigos de los hechos, señalan que al momento de presentarse la situación, los agresores señalaban: “lo merecen por cuidar a esta vieja hp (…) mi patrón es el que la necesita”. Seis horas después de iniciada la retención y sometidas las personas que se encontraban en el lugar, los agresores se retiran del lugar, llevándose las llaves de los vehículos, entre ellos la camioneta del esquema de la Unidad Nacional de Protección.
Tan pronto pudieron, la líder y quienes se encontraban en el lugar, se contactó a la policía de Piñal, sin embargo, la atención de esta situación no fue hecha a tiempo. Tampoco se pudo hacer una comunicación con las autoridades en Villavicencio.
La líder en este momento se encuentra refugiada en un hotel, junto a un familiar y sus escoltas. Duraron varias horas incomunicados y en espera de que las autoridades locales y departamentales actuaran. En medio de la situación los hombres armados también se llevaron los celulares, los documentos y los computadores de la protegida.