Jóvenes se preparan para participar en su festival nacional
Redacción Bogotá
El día 22 de julio de 2017 nos dimos cita jóvenes que vivimos, habitamos, transitamos, estudiamos, trabajamos y parchamos en el Centro Oriente de la ciudad de Bogotá. Jóvenes de las localidades de Santa Fe, Candelaria, Mártires, Teusaquillo, Antonio Nariño, decidimos unirnos, conocernos y dialogar sobre lo que pasa en nuestros territorios, críticar y generar propuestas.
El festival tuvo un primer escenario de construcción de diagnóstico y propuesta. Según comentó Paula Pardo, líder estudiantil de la ciudad, “intercambiamos acerca de la necesidad de espacios amplios de discusión en el distrito para la nueva política pública de juventud que regirá los destinos de las y los jóvenes de la capital, del 2017 al 2027. Analizamos y refutamos cómo se está realizando el proceso para la creación de dicha política por parte de la actual alcaldía en donde solo se generan espacios cerrados y excluyentes que no cuentan realmente con la voz del joven del barrio, el estudiante, el joven trabajador, el desempleado, el que forja territorio día a día, el que se esfuerza por generar lazos comunitarios, el que es un potencial desplazado del centro”. Según reafirma, estos espacios los une la necesidad de expresar sus inquietudes sobre la ciudad y la realidad social.
De igual manera, la joven cuenta que se han venido posicionando como veedores y ejecutores de la implementación de los acuerdos de paz en la ciudad, por lo que este festival los jóvenes rechazaron los asesinatos a líderes sociales, exigiendo poner en marcha el plan de desmonte del paramilitarismo tanto en la ciudad como a nivel nacional, además de hacer un llamado para dar libertad a todas y todos los presos políticos que siguen recluidos en las cárceles de Colombia.
Veedurías comunitarias para garantizar derechos
“Concluimos que la participación en política por parte de nosotras y nosotros trasciende los escenarios electorales, la apatía frente a lo que sucede en nuestros territorios es una enemiga. Por esto, espacios de discusión y propuesta son de vital importancia para construir una ciudad incluyente y con garantías. Debemos alzar la voz frente a los ciclos de corrupción y discriminación que padece nuestra ciudad en todos los niveles, por lo que el proceso de Festival (zonal, distrital, nacional y mundial) debe ser un espacio político que represente las voces de todos y todas”, relata Paula.
Entre otros elementos, también tocaron temas como la necesidad de garantizar escenarios de educación gratuita y de calidad tanto básica como media y superior. Además se dijo que dentro de la política pública se deben desarrollar programas que logren articular al mundo laboral con los jóvenes de manera digna. Asegura Paula: “Creemos que es necesario crear un sistema de salud integral y gratuito que realmente se comprometa con la prevención y atención integral a los ciudadanos y particularmente a los jóvenes. En la ciudad de Bogotá se vulneran constantemente los derechos humanos de los jóvenes, por lo que se propone la conformación de veedurías comunitarias en las localidades para proteger los derechos humanos. Estas veedurías deben construirse sobre la base de la desmilitarización de los territorios, el derecho a la protesta social y un servicio social para la paz”.
Otra de las propuestas que se generaron a propósito de las constantes situaciones de exclusión y segregación social en la ciudad, es poder ayudar en la formulación de “rutas de acción y campañas de denuncias ante las violencias de género que se viven en los territorios, además de esto es importante la creación de políticas integrales e incluyentes con las diversidades sexuales. Una de las poblaciones que usualmente es más excluidas en la ciudad es la población étnica por lo que se exige una inclusión dentro de la política pública de la juventud, de la población etnodiferenciable, en donde se puedan solucionar sus problemáticas socio económicas, además de un análisis real de este grupo poblacional dentro del distrito. Igualmente se deben generar garantías a la población del centro oriente de Bogotá para la permanencia en su territorio”.
Los debates de la ciudad, de cara al país
Por otra parte, y teniendo en cuenta los debates en la ciudad, los diversos jóvenes que participaron de este espacio, rechazaron enfáticamente el Plan Zonal del centro y los procesos de gentrificación actualmente en curso. Además, exigieron una política medioambiental que se construya de la mano de los intereses de las y los habitantes del territorio.
Este festival contó con un espacio cultural en donde se presentaron bandas de distintos géneros musicales y un show circense, que por medio del arte nos expresó sus visiones. Fue un momento para la integración, pero también para señalar que los jóvenes también expresamos nuestras ideas políticas de diversas formas, y recuperar el papel del arte y la cultura es una de nuestras prioridades.
El proceso de construcción de este festival contó con un elemento festivo, en vías de escuchar todas las voces de los jóvenes de la ciudad se realizarán tres festivales zonales más, donde abarcaremos el resto de localidades, empezando con el festival de la zona occidente, siguiendo el festival zonal del sur y del norte. Con las enseñanzas de estos cuatro festivales, se tendrá un espacio de encuentro en donde un grupo pueda sacar las conclusiones en vías de llevar las propuestas y participar activamente en el festival nacional de la juventud, que se desarrollará en Medellín los días 19, 20 y 21 de agosto del presente año.