El país está urgido de conocer la verdad de lo ocurrido en los años del conflicto social armado que afectó la sociedad colombiana a partir de los años sesenta del siglo pasado. Hasta ahora solo contamos con la versión oficial, por tanto tenemos una visión parcial de lo ocurrido. Pero a partir del Acuerdo Final de paz, miembros de la insurgencia han empezado a publicar la poesía, los cuentos, las novelas y ensayos escritos en los últimos cuarenta años, por tanto la sociedad tiene ahora la oportunidad de conocer los acontecimientos ocurridos, desde la perspectiva y valores del otro protagonista de la guerra social.
Efectivamente, este rasgo de la literatura fariana es destacada por el prologuista Pablo Catatumbo: “Cada trocha, cada filo, cada montaña, cada quebrada de la Colombia profunda, contiene una historia desconocida para la mayoría de la población colombiana. Este libro, El último fusil, precisamente representa un esfuerzo por recuperar esas historias no contadas”
En la versión actual de la Feria del libro Gabriel Ángel y Rubín Morro, han puesto a disposición de los lectores las obras A Quemarropa del primero y El último fusil y Diario de la guerra y la paz, del segundo. El dos de mayo, último día de feria, será el lanzamiento de la obra de Rubín.
Rubín Morro, nombre de batalla y Martín Cruz Vega, de pila, empezó su obra literaria escribiendo poemas desde los años ochenta, envió la poesía a su familia, pero en un allanamiento de la inteligencia militar se apoderó de esos escritos. Los libros mencionados recogen poemas y narraciones elaborados a partir de los años noventa, en la región de Urabá; los textos concebidos en los años once, doce y trece, cuando se endureció la confrontación. En algunos momentos, pensando que del total de combatientes que hicieron con él entrenamiento militar, solo sobrevivían dos, varias veces pensó que el moriría también. Momentos psicológicamente complejos como estos, narrados por el autor, dan a la obra una dimensión dramática que crea en el lector la misma tensión emocional que cualquiera novela de los narradores consagrados.
Quien quiera que lea El último fusil relatos y poemas será recompensado por el conocimiento de la Colombia profunda de la geografía desconocida y recibirá además la visión y hálito de la selva y la forma taumatúrgica como los guerrilleros logran entender la selva, y como superar sus retos. Además adquirirán un plus: la hermosa filigrana conque son descritas las relaciones de los guerrilleros, su sensibilidad, su solidaridad con lo cual nos apropiamos de su actuar profundamente humano. Este libro marca un hito en la literatura alternativa colombiana.