Redacción Cultural
Hoy jueves 2 de diciembre, en la Galería 419 se realizará el lanzamiento de Los odontólogos del horror, el más reciente libro del escritor bumangués Jorge Andrés Garavito Cárdenas. El evento lo organiza Escarabajo Editorial y contará con la participación de los poetas John F Galindo, Nicolás Peña y Diego Peña, y con la intervención musical de Mateo Poveda.
El libro retrata una ciudad llamada Bocatá que es invadida por unos odontólogos Zombis, que se hacen de la institucionalidad. Solo un grupo de ciudadanos, llamados LAS CARIES, se atreven a enfrentarlos. Pero, a pesar de sonar como el argumento de una película serie b o una novela de caseta, se trata de un libro de poesía donde se exploran diferentes facetas de esta expresión creativa del lenguaje. «Es una búsqueda por burlar esas camisas grises que han vestido tradicionalmente los libros de poesía», dice el autor a propósito de su libro.
“Esta obra es una eficaz metáfora de nuestra cultura y sus relaciones de poder. Una imagen contemporánea y, a la vez, clásica, en la medida que muestra que son las mismas estructuras tiránicas del pasado —más sofisticadas— las que nos rigen: el sádico que intenta dominar; los masoquistas domesticados. Pero no todo es fácil para los poderosos: la resistencia poética es acción pura. Los cuerpos se emancipan bailando en medio del capitalismo ulcerado. Contra Los odontólogos del horror, la poesía es nuestra arma de guerra, la más contundente; la única que tenemos”, es el prefacio del poeta Michael Benítez.
El evento se realizará hoy jueves 2 de diciembre, en Galería 419, ubicada en la carrera 4 #19- 56, segundo piso, de la ciudad de Bogotá, a las 6:30 de la tarde. Tendrá entrada libre.
Dentista del lenguaje
Con tus poemas me haré un collar.
Yo le puse calzas a la caverna
donde se escondieron todas las palabras que nunca dijiste.
Yo sé cuánto sufre
la saliva que no se convierte en mensaje.
Y
tu lengua
nada rosada cerca de mi mano
compitiendo con el brillo de tus labios.
Rojos ellos
roja ella
que estalle en rojo todo
y así liberemos el lenguaje más sincero
el del romance
de mi mano y tu dolor.
Con tus treinta y dos poemas perlados me haré un collar.
Yo sé cuánto sufre
la saliva que no se convierte en lenguaje.
De mi trabajo amo
los ríos de sangre que me regalas
junto a tus perladas babas.
Con tus treinta y dos poemas me haré un collar blanco.