Palestina, el triunfo de la solidaridad

0
1365
Una mujer palestina, en medio de la protesta contra la anunciada anexión israelí, levanta una bandera de su patria.

Las reacciones y los pronunciamientos internacionales impidieron el más reciente intento de robo de territorio palestino por parte de la entidad sionista. Al régimen israelí le va a ser más difícil seguir actuando con impunidad

Alberto Acevedo

Desde el año 1967, los diferentes gobiernos laboristas y derechistas de Israel han venido poniendo en práctica una política de despojo de tierras al pueblo palestino en Cisjordania, incluyendo a Jerusalén, su capital. Este despojo, a veces silencioso, ha contado al menos con la indiferencia de una parte de la comunidad internacional, que ha mirado para otro lado frente al pillaje sionista.

En esta ocasión, el gobierno de Benjamin Netanyahu, no se sabe si en un acto de soberbia o ingenuidad, anunció públicamente su intención de anexarse una parte de Cisjordania, ya ocupada, y le puso fecha a la acción invasora, fijada para el primero de julio.

Varios analistas internaciones aseguran que este anuncio fue lo peor que pudo hacer Netanyahu, que incluso no cuenta para su aventura con el apoyo pleno de su aliado principal en la coalición de gobierno, el señor Benny Gantz, del partido Azul y Blanco. En efecto, en la medida en que se aproximaba el primero de julio, fue cuajando un vigoroso movimiento de rechazo a las pretensiones anexionistas de Israel, tanto a nivel interno como externo.

Alianza histórica

Para la fecha anunciada, en las principales ciudades palestinas se realizó una jornada denominada “El día de la ira”, cuyo objetivo central fue rechazar el plan de anexión de su territorio. No menos de 60 mil personas se lanzaron a las calles en una región sitiada por las tropas sionistas. En la madrugada de ese mismo día, en un ejercicio militar inusual, el Movimiento de la Resistencia Palestina, Hamas, disparó al menos 20 misiles en dirección al mar, cerca de la Franja de Gaza.

Otro hecho inédito es que, por primera vez en varias décadas, los movimientos Hamas y Al-Fatah, del presidente palestino Mahmud Abbas, se aliaron en un movimiento nacional estratégico contra la anexión. Este, sin duda es un paso histórico, porque especialmente Hamas criticó siempre posiciones blandengues y conciliadoras con el enemigo histórico Israel y con Estados Unidos, por parte de Al-Fatah.

Prácticamente la totalidad de los movimientos palestinos, en el interior y el exterior saludaron el anuncio de ambos movimientos, hecho en el marco de una rueda de prensa. La Jihad Islámica Palestina, una de las convocantes al ‘Día de la Ira’, fue una de las primeras en reaccionar favorablemente ante el paso dado, calificado como “nueva fase de acción nacional conjunta para enfrentar el plan de anexión israelí”. “Israel no disfrutará de calma por mucho tiempo”, dijeron líderes de la resistencia.

Condena universal

Las reacciones internacionales tampoco se hicieron esperar y los pronunciamientos hasta ahora insinuarían un nuevo momento en el que al régimen israelí le va a ser más difícil seguir actuando en la impunidad. Rusia, China, la Unión Europea, varios países árabes y el Secretario General de las Naciones Unidas señalaron que “la anexión viola el derecho internacional, colocando en riesgo la estabilidad y los esfuerzos de paz en la región”.

El primer ministro británico Boris Johnson, tradicional aliado de Israel, urgió al gobierno de ese país a no anexionarse partes de la Cisjordania ocupada. Dijo el premier, que cualquier anexión “es una violación a la ley internacional” y recalcó que el Reino Unido no reconocerá cambios en las fronteras establecidas en 1967.

En un movimiento diplomático inusual, El Vaticano convocó a los embajadores de Estados Unidos e Israel, para expresar la preocupación de la Santa Sede sobre los movimientos de Israel para extender su soberanía a los asentamientos judíos y al Valle del Jordán, en Cisjordania. El Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, indicó a los diplomáticos que la Santa Sede condena cualquier acción unilateral de Israel en esa dirección.

Críticas a la ONU

En América Latina, al lado de la condena por parte de varios gobiernos al anuncio de Tel Aviv, también el Grupo de Puebla se pronunció en la misma dirección. “Como Grupo de Puebla y representantes del progresismo latinoamericano, sentimos la obligación de pronunciarnos y solidarizarnos activamente frente a la inminente anexión de tierras palestinas”, dice un pronunciamiento del grupo, frente a lo cual exteriorizó su “total rechazo”.

Pese a la unanimidad de la comunidad internacional, que cerró filas alrededor de la causa palestina, se levantan voces de crítica a la Organización de las Naciones Unidas que, pese a producir varias resoluciones de condena contra la política de apartheid israelí, le critican la falta de un mecanismo sancionatorio para detener la impunidad.

Recuerda que por mucho menos de lo que hace Israel, la ONU autorizó invadir Irán, Libia, Afganistán y otras naciones acusadas de violación de derechos humanos. En realidad, solo se producen advertencias a Israel para que renuncie a las “medidas unilaterales”, pero en el fondo el régimen de Tel Aviv se burla de esas sanciones, mientras sigue teniendo el apoyo militar y financiero de Estados Unidos y buena parte de la Unión Europea.

📢 Si te gustó este artículo y quieres apoyar al semanario VOZ, te contamos que ya está disponible la tienda virtual donde podrás suscribirte a la versión online del periódico. 

#QuédateEnCasa y lee el semanario VOZ.

👇🏽👇🏽👇🏽

tienda.semanariovoz.com