
Redacción Laboral
Más de 80 mil maestros de todo el país acudieron a la convocatoria del comité ejecutivo de la Federación Colombiana de Educadores, Fecode, para tomarse las principales calles de Bogotá; mientras que miles más marchaban en las capitales de departamento.
La manifestación se hizo en el contexto de un paro nacional indefinido que había iniciado el pasado 11 de mayo, por los incumplimientos del Gobierno Nacional a lo acordado en la negociación del año 2015. En aquella ocasión, los docentes habían pactado con el Ministerio de Educación una nivelación salarial para estar a la altura del resto de trabajadores estatales; mejores condiciones de salud e infraestructura para la implementación de la jornada única, entre otras cosas.
En el acto político y cultural de la Plaza de Bolívar del día de hoy en Bogotá, intervinieron los dirigentes de las principales centrales obreras, quienes luego de caracterizar las políticas económicas del actual Gobierno y señalar que van a favor del capital foráneo y en contra de los intereses de la mayoría de los colombianos, dijeron estar dispuestos a sentarse a la mesa de negociación siempre y cuando el Gobierno llegue con propuestas reales y no con mentiras, como: “No hay plata”. En ese sentido, el presidente de Fecode, Carlos Rivas, cuestionó dónde están los recursos del ahorro de los 28 billones de pesos por ausencia de guerra y adónde llegarán los recursos captados por la última reforma tributaria, además de la corrupción como en los casos de Odebrecht y Reficar.
A las movilizaciones de hoy se unieron organizaciones de trabajadores estatales como la rama de la justicia, el Inpec, el Sena, el Ministerio del Trabajo, la DIAN, la Asociacion Sindical de Profesores Universitarios; algunas de las cuales continuarán en paro exigiendo mejores condiciones en su contratación, rechazo a las nóminas paralelas, presupuesto para estas entidades y salarios dignos. Al final de las intervenciones, todas y cada una de las centrales obreras mostraron la solidaridad con paros cívicos como los de Chocó y Buenaventura, de los que dijeron tendrían que extenderse por todo el país; para lo cual la movilización de hoy es solo un abrebocas de lo que debe ser un paro nacional, que ya se organiza por parte del Comando Nacional Unitario en unidad con organizaciones cívicas y campesinas.